Blogia
ARTEVIRGO, desde La Aldea, miradas y voces

LA ROMERÍA DE SAN NICOLÁS DE TOLENTINO

LA ROMERÍA DE SAN NICOLÁS DE TOLENTINO

La romería de San Nicolás de Tolentino congregó, como en fiestas de 10 de septiembre anteriores, a una cantidad elevada de participantes. Cerca de 43 grupos con carretas y parrandas comenzaron a bajar desde las 7 de la tarde hasta pasadas las 11 de la noche.

Como viene ocurriendo, desde que, allá por los años 90 del siglo pasado, comenzara la participación masiva en este acto supuestamente religioso, la romería se está convirtiendo en ronería.

Cada vez son más las personas vestidas de algo parecido a un cuento de Cho Juá mal imitado, cacharra de cerveza o cubata en vaso de plástico en mano, que bajan desde Los Llanos hasta La Alameda, haciendo gala de un regusto por el grito, el humo de las salchichas, las neveras de playa mal disimuladas en las carretas, o la cháchara y el desconcierto.

Por si fuera poco, a todo esto le podemos añadir una asombrosa cantidad de foráneos y paisanos que se han especializado en andar de grupo en grupo pidiendo y comiendo de gorra, medio vestidos de “típicos”, medio de lo que sea.

Se nota también un especial interés en hacer poses propias del Messenger y las terrazas veraniegas a la primera de cambio que asoma una cámara.

Como sigue desgraciadamente ocurriendo, coletitas, zarcillotes, gafas de sol, playeras, sombreros de publicidad, los chalecos llenos de pins y otras hierbas.

Y mientras tanto, muy pocos productos de la tierra para entregarlos en la ofrenda al santo, para destinarlos a instituciones caritativas.

La música ya es harina de otro costal: cumbias, rancheras, hasta reguetón. Para oír una isa o una folía había que darse muchas vueltas.

En resumen: mucha gente, pocas ofrendas; mucho ron y demasiado exhibicionismo.

 

¡Ay!, San Nicolás,

me cago en diez,

no puedo más…

PARA LEER UN EXCELENTE ARTÍCULO DE OPINIÓN RELACIONADO: PULSA AQUÍ 

 



 

1 comentario

DIONISIO -

Hola soy un fanatico de la romerias, pero este año se me han perdido algunas como la de cardones y otra mas.

La verdad que si en vez de romeria es roneria, no hace falta beber para divertirse ni hacerse el gracioso.

Yo voy a las romerias, salto, brinco, bailo, voy patras y palante, no bebo, bebo solo refresco y agua, y yo me lo paso pipa mejor que los que estan ya todos borrachos haciendo maldita gracia que nos hace, por que eso hace perder todas nuestras costumbres.